Tres amigos fueron acribillados la tarde del lunes mientras compartían una caja de cervezas bajo un árbol, en la invasión Negra Hipólita, del sector Ma‘ Vieja, en el municipio San Francisco.
Los muertos fueron identificados como José Luis Morales, de 47 años, Carlos Javier Soto, de 45, y Juan Manuel Mavásrez, de 34. Este último menor de nueve hermanos.
Quienes acompañaban a los amigos, en lo que sería una tarde feliz, fueron unas mujeres que preparaban un sancocho, “como era costumbre todos los lunes”.
Todo iba normal, hasta que a espaldas de los amigos, entraron —por un callejón estrecho— dos pistoleros, que se acercaron de manera sigilosa y con señas hicieron el gesto a las mujeres para que guardaron silencio
“¡Fue horrible!”, recordó una de las mujeres. “Ellos llegaron sin hacer bulla y cuando se acercaron, le dispararon a Juancito. porque intentó correr. Los otros dos no pudieron hacer nada, también les dispararon. Yo corrí y me escondí detrás de aquellas latas y después los tipos se fueron en un carro gris”, dijo.
Una bala impactó a una joven embarazada, quien presentó la herida en el muslo derecho. La llevaron al Hospital Manuel Noriega Trigo. Se conoció que sigue recuperándose, pues la lesión, al parecer, fue rasante.
Familiares de Morales y Soto dijeron en la morgue que ambos murieron en la policlínica San Francisco, después que ellos mismos los trasladaron, pero que Juan murió en el sitio.
“Estamos sorprendidos, cuando nos avisaron que los habían tiroteado fuimos hasta allá para auxiliarlos”, contó una de las hermanas de Morales.
Señalaron que ellos eran amigos desde la infancia, y que Morales vendía queso a domicilio, lo repartía en un carro casa por casa a sus clientes.
De Soto, se supo que trabajaba en la compra y venta de vehículos. “Estaba en un galpón en el barrio La Polar, de eso vivía”, dijo José Villegas, un tío.
Fuentes del Cicpc informaron que entre los tres amigos habían recibido más de doce balazos y que los sicarios “llegaron a matar”, por lo que descartan el móvil de un robo.
“Estamos manejando hasta ahora este hecho como una venganza, sin embargo, estamos realizando las entrevistas a familiares y amigos para esclarecer el triple crimen”, agregó un informante de la policía científica.
Se conoció que Morales, Soto y Mavarez, residían en el sector La Punta, a pocos minutos del sitio del crimen.
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