La
delincuencia del casco central de la ciudad cobró la vida de otro
zuliano. Miguel Eduardo Insignares Corrales (25), politólogo, fue
atacado la noche del viernes, por atracadores, mientras acompañaba a una
amiga para tomar el trasporte público e ir a sus casas.
El crimen ocurrió, cerca de la avenida
Libertador, en el casco central de la ciudad, cuando el politólogo y su
amiga caminaban por la calle para tomar un carrito por puesto y llegar a
su casa, luego de culminar la jornada laboral.
“Mi hermano daba su vida por salvar a
otra persona y así lo hizo hasta su último día de vida. Se arriesgó él y
defendió a su amiga para que los asaltantes no le hicieran daño”,
describió el hermano mayor de Insignares, quien prefirió el anonimato.
Insignares trabajaba en una venta de
jugos y batidos, ubicada en la calle 72. De allí salió a las 6:00 de la
tarde y a las 7:00 de la noche le dieron una puñalada en el pecho.
“En varias oportunidades hablamos sobre
la inseguridad que hay en el centro de la ciudad y él decidió cambiar
sus rutas como medida preventiva. Ayer, —viernes— tomó el carrito de
Bella Vista y al llegar a la parada, en el centro, acompañó a su amiga a
tomar la otra ruta”, destacó el pariente.
En lo que va de año, más de 13 personas
han muerto en manos de la delincuencia, en el casco central, donde por
las noches actúan los hampones bajo el amparo de la oscuridad.
Insignares había sido víctima de
atracos en otras oportunidades. Dos en el 2013 y otra hace pocos meses.
“Quizás mi hermano forcejeó con los hampones, mientras que a su amiga le
daba tiempo a correr”, refirió el familiar.
Los delincuentes atacaron a Insignares con un arma blanca. La herida punzo penetrante la recibió en el pecho.
“Los carretilleros lo auxiliaron y lo
llevaron al Hospital Chiquinquirá. A las 7:30, cuando llegué a verlo, ya
estaba muerto”, contó su hermano.
Fuentes policiales revelaron que el
crimen fue perpetrado por consumidores de droga de la zona, que tienen
en la mira a los transeúntes.
Al politólogo lo despojaron de su teléfono celular y de la quincena que había cobrado, luego de su jornada laboral.
“Mi hijo se caracterizaba por ser un muchacho luchador y alegre, con una inteligencia incomparable. De hecho, el mismo viernes en la mañana, fue a la Urbe a inscribirse para estudiar ingeniería en Computación, ya tenía un título de licenciado en Ciencias Políticas, en enero de 2013. Se graduó en LUZ”, expresó su padre, consternado por el trágico crimen.
“Mi hijo se caracterizaba por ser un muchacho luchador y alegre, con una inteligencia incomparable. De hecho, el mismo viernes en la mañana, fue a la Urbe a inscribirse para estudiar ingeniería en Computación, ya tenía un título de licenciado en Ciencias Políticas, en enero de 2013. Se graduó en LUZ”, expresó su padre, consternado por el trágico crimen.
Insignares, además, era músico y
estudiaba francés. “Siempre le gustó la música. Tocaba la guitarra y el
teclado como un profesional. Siempre luchó por sus sueños y estaba
estudiando francés para irse del país. No quiero entrar a su cuarto,
porque el ver sus cosas me va a partir el alma”, expresó con lágrimas su
hermano.
Los familiares hicieron un exhorto a la
policía: “Mi hermano es otra víctima de la delincuencia. Espero que no
quede impune su muerte, porque realmente era un muchacho sano... Mañana
puede pasarle a otra familia”.
Insignares residía en la urbanización La
Paz, parroquia Cecilio Acosta. Su cuerpo está siendo velado en la
funeraria San Tarsicio y el sepelio será este domingo 31 de agosto, en
el cementerio San Sebastián.
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