.

.

miércoles, 19 de octubre de 2016

El cáncer de mama también se desarrollan en los hombres



Todo empezó cuando su mujer le descubrió un pequeño bultito en el pecho. Santiago tenía entonces 37 años y dos niños muy pequeños. «Lo primero que pensé es que era un quiste sebáceo sin importancia, pero decidí consultárselo al médico. En el hospital me dijeron que no era nada, que me olvidara. Pero yo no podía olvidarme, el bulto seguía allí y aunque me sentía bien consulté con otro médico. 

Por segunda vez, me dijeron que no tenía importancia. Seis meses más tarde decidí ir a un cirujano para que me lo extirpara y acabara con aquel bulto molesto de una vez por todas. Entonces es cuando llegó la sorpresa. El análisis de la muestra reveló que era un tumor de mama maligno». 

Santiago López todavía se indigna al recordar el rosario de especialistas que le examinaron sin que ninguno llegara a sospechar que un varón también podía tener cáncer de mama. «Yo hice lo que tenía que hacer como paciente. Consulté con un médico, no solo una sino tres veces. Y, pese a mi insistencia, mi diagnóstico se retrasó un año. Hoy estoy vivo después de un tratamiento muy duro, pero no sabemos lo que podía haber ocurrido si me hubieran tratado a tiempo.

Ernesto Herrero (74 años) tuvo más suerte. Su médico del centro de Salud nada más verle torció el gesto cuando vio cómo su pezón se había retraído hacia dentro. «”Nunca he visto nada igual”, me dijo, y me envió sin dudar a un internista para que me valorara e hiciera una biopsia». Después, llegó lo más duro: cirugía, quimioterapia, caída de pelo…, y cinco años después una recaída que hoy está casi olvidada.

El cáncer de mama masculino es una rareza clínica. Por cada cien mujeres, apenas hay un varón afectado. Es una enfermedad tan femenina que el rosa sigue siendo el color que tiñe las campañas de prevención y es fácil que se escape a la sospecha de médicos no especializados. Se han hecho tantas campañas de concienciación, que no hay médico que no se alerte ante la presencia de un bulto anómalo en el pecho de una mujer. En cambio, en el varón, la primera sospecha casi siempre es un acúmulo de grasa.

Síguenos a través de nuestro pin: 5EF318C8 y el twitter@elparroquiano
Si deseas comunicarte con nosotros ya sea para denunciar, aportar o publicitar con nosotros, escríbenos acá: eparroquiano5@gmail.com

No hay comentarios.:

Publicar un comentario