El Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo y Aguas (Minea) en Mérida junto con la Coordinación Estadal de Guardería Ambiental, realizaron un abordaje para atender un brote del caracol gigante africano (Achatinafulica) en el municipio Antonio Pinto Salinas.
Un total de 16 kilos fueron recolectados durante dos jornadas de control y erradicación desplegadas en la parroquia Mesa las Palmas y la población de Santa Cruz de Mora, con el apoyo del Consejo Comunal Alberto Ravell y la Unidad de Diversidad Biológica del Minea.
El caracol africano puede ser portador de algunos organismos patógenos como parásitos, virus y bacterias, entre otros, que pueden transmitirse a los humanos, por lo cual el equipo del Minea realizó un conversatorio con la comunidad para alertar sobre las medidas de prevención que se deben tomar.
La mencionada especie está catalogada como una plaga agrícola que ataca varios cultivos entre ellos: cacao, café, caraota, yuca, repollo, lechuga, maíz y plátano. Debido a su gran voracidad puede llegar a causar impactos negativos en los cultivos y ecosistemas.
Se recomienda a las personas que consigan el caracol africano en sus predios, utilizar guantes y colocarlos en un envase con tapa contentivo de tres litros de agua y un kilo de sal, tapar el envase y esperar 24 horas. Luego se saca el caracol del recipiente, enterrarlo en un hueco de 40 centímetros de profundidad y añadir cal.
Asimismo, se recomienda a las comunidades asegurarse de que el caracol a controlar es realmente el africano para no afectar las poblaciones de la guácara, especie autóctona venezolana. El caracol africano se reconoce porque tiene la concha de rayas marrón oscuro y beige, y puede medir hasta 30 centímetros.
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